Rutas culturales
La Montaña Alavesa permite al visitante disfrutar de hermosos pueblos, villas medievales, ermitas, cuevas y en general, un rico patrimonio artístico-cultural.
La Montaña Alavesa permite al visitante disfrutar de hermosos pueblos, villas medievales, ermitas, cuevas y en general, un rico patrimonio artístico-cultural.
En el apartado publicaciones de esta sección encontraras más información en fichas individuales de estas cinco rutas.
Nos acerca a las localidades de Vírgala Mayor, Apellániz, Leorza, Cicujano, Maeztu, Antoñana y Bujanda.
Recorre las localidades de Santa Cruz de Campezo, Orbiso, San Vicente de Arana, Alda, Ullibarri-Arana, Contrasta y Roitegui.
Recorre las localidades de Korres, San Román de Campezo, Quintana, Urturi, Navarrete, Bernedo, Villafría y Villaverde.
Recorre las localidades de Faido, Laño (Trebiño), Urarte, Marquínez y Arluzea.
Recorre las localidades de Baroja, Payueta, Peñacerrada, Pipaón y Lagrán.
En esta ruta damos a conocer una muestra de las ermitas de la Montaña Alavesa. Todas ellas con unas características personales y con su propia historia de devociones y cofradías.
Faido
Faido es una pequeña localidad perteneciente al Municipio de Peñacerrada.
Muestra una de las joyas del patrimonio del País Vasco, la ermita de la Virgen de la Peña, fechada entre el s. XIII y XIV. Fue construida dentro de una cueva artificial originada en la Alta Edad Media, en las grutas de Kruzia.
Es la iglesia cristiana más antigua que se mantiene con culto en el País Vasco y conjunto histórico-artístico, declarado Monumento Nacional de Euskadi.
Markinez
La villa de Marquínez cuenta con la Ermita de San Juan, situada a las afueras del pueblo y junto a la carretera que une Marquínez con Arlucea.
Es uno de los más bellos ejemplos del románico alavés y Monumento Nacional de Euskadi.
Bernedo
Santa Cruz de Campezo
Maeztu / Maestu
Ullibarri / Harana
Kontrasta
De construcción románica edificada en gran parte con lápidas romanas.
Junto a la ermita quedan restos de sepulturas medievales. Desde su emplazamiento se puede disfrutar a demás de una placentera y amplia vista de toda la localidad, así como de los barrancos que discurren a ambos lados de la Villa.